El riesgo país superó los 4000 puntos, trepó el precio del dólar y las acciones se desplomaron
En otro día complicado para los activos argentinos en medio de un desplome financiero global por el avance del brote del coronavirus. A las 17.14, el riesgo país se ubicaba en los 4040 puntos básicos y avanzaba 11,9% con respecto a su valor del martes. El indicador sigue en niveles récord desde 2005, antes de que el país completara la reestructuración de la deuda.
El dólar mayorista escaló 14 centavos y cerró a $63,32. El minorista subió 50 centavos y se vendió a $65,46. Cabe aclarar que a ese valor hay que sumarle el 30% del impuesto PAIS, por lo que la cifra final para el dólar turista fue de $85,09.
El Banco Nación, que suele tener una de las cotizaciones más bajas del mercado, vendió a $65 ($84,50 con impuesto PAIS), 50 centavos por arriba de su cierre de ayer.
El dólar blue crece $2,75 centavos hasta los $89,25. Esta semana, el tipo de cambio paralelo al oficial por primera vez desde la imposición del cepo cambiario.
Las acciones argentinas en Wall Street retrocedían hasta un 33% esta tarde. A las 15.54 en la Argentina, las que más caían eran las de YPF (32,2%), Grupo Financiero Galicia (20,88%) y Banco Macro (18,14%).
En la bolsa local, el Merval bajaba 14,4%. Las acciones que más perdían eran las de YPF (30%), Mirgor (18,6%) y Cresud (18,1%).
José Ignacio Bano, gerente de Research de InvertirOnline, asegura que el Merval está en un piso histórico, similar a lo que sucedió en la crisis de 2001. «Es una señal de compra para el inversor más agresivo», dice.
A esa misma hora, el índice industrial Dow Jones se desplomaba 8,44%. El S&P 500, 7,31%. El Bovespa, de la Bolsa de San Pablo, retrocedía 14,63%.
Las bolsas europeas cerraron con números rojos a pesar de los anuncios oficiales en la lucha contra la pandemia. Londres perdió 4,05%; París, 5,94%; Frankfurt, 5,56%; Madrid 3,38% y Milán, 1,27%.
El precio del petróleo volvió a derrumbarse. En Nueva York, el barril de WTI para entrega en abril terminó en US$20,37, una baja de 24,4%. Está en su valor mínimo desde febrero de 2002. A minutos del cierre, el Brent para entrega en mayo valía US$24,67, cerca de un mínimo desde 2003 y con una caída del 14%.
Es una crisis «petrocorona», dice Leonardo Chialva, socio de Delphos Investment. «Los mercados no hacen pie y hay una continuación permanente de liquidaciones compulsivas de posiciones», explica. Los fondos minoristas o institucionales se retiran de sus activos.
«Hoy nadie opera con expectativas, todos operan con incertidumbre, que es el peor enemigo de los mercados», añade Chialva. «¿No es contradictorio intervenir en todo el sector privado real y dejar que el sector privado financiero se desplome?», se pregunta.
«Los gobiernos del mundo están dando una respuesta al coronavirus con una política expansiva y activa, y sin embargo los mercados no responden o responden mal. Esto tiene que ver con el avance de la enfermedad y con que ya no se sabe dónde va a terminar», detalla, por su parte, Matías Rajnerman, economista jefe de Ecolatina.
El Ministerio de Economía lanzó un megacanje de bonos en pesos esta semana «y hay que ver dónde va a terminar», dice Rajnerman, y añade: «Nos tocó la peor semana para lanzar el canje y el peor año para negociar la deuda». Cuanto peor esté el escenario financiero local, más aparecerán los inversores más arriesgados, advierte, aquellos que menos ganas de quita tienen.
«El riesgo país está subiendo en todo el mundo y la Argentina está en un extremo, porque está entre los más castigados», dice Bano. Es un termómetro, pero a esta altura «a los fines prácticos» indica que el mercado está cerrado para el país, añade.
Ayer, el ministro de Economía, Martín Guzmán, y su par de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, anunciaron durante una conferencia de prensa en la Casa de Gobierno 17 medidas para contener y potenciar la producción y la economía local por la pandemia del coronavirus Covid-19.
Entre ellas, se eximirá el pago de contribuciones patronales a los sectores afectados de forma crítica por la emergencia, se ampliará el Programa de Recuperación Productiva (REPRO) para garantizar el empleo de aquellos que trabajan en empresas afectadas por la emergencia sanitaria y se reforzará el seguro de desempleo.
